miércoles, 29 de septiembre de 2010

Monserrat Cultural N° 35

Imagen de Tapa: “Ivy” de Eric Cañete

Editorial

Una vez más, ante las toneladas de basura que se desparrama sobre nuestras mentes desde casi cualquier pantalla, me doy -y comparto- un poco de aire para despejar las cabezas:
Caminos
Por Eduardo Galeano

Querido Stig:
Ojalá seamos dignos de tu desesperada esperanza.
Ojalá podamos tener el coraje de estar solos y la valentía de arriesgarnos a estar juntos, porque de nada sirve un diente fuera de la boca, ni un dedo fuera de la mano.
Ojalá podamos ser desobedientes, cada vez que recibimos órdenes que humillan nuestra conciencia o violan nuestro sentido común.
Ojalá podamos merecer que nos llamen locos, como han sido llamadas locas las Madres de Plaza de Mayo, por cometer la locura de negarnos a olvidar en los tiempos de la amnesia obligatoria.
Ojalá podamos ser tan porfiados para seguir creyendo, contra toda evidencia, que la condición humana vale la pena, porque hemos sido mal hechos, pero no estamos terminados.
Ojalá podamos ser capaces de seguir caminando los caminos del viento, a pesar de las caídas y las traiciones y las derrotas, porque la historia continúa, más allá de nosotros, y cuando ella dice adiós, está diciendo: hasta luego.
Ojalá podamos mantener viva la certeza de que es posible ser compatriota y contemporáneo de todo aquel que viva animado por la voluntad de justicia y la voluntad de belleza, nazca donde nazca y viva cuando viva, porque no tienen fronteras los mapas del alma ni del tiempo.
(Palabras de agradecimiento, al recibir el premio Stig Dagerman, en Suecia, el 12 de septiembre, 2010.)

Ojalá haya más aire, salud y educación para todos. Ojalá el mal y la estupidez se tomaran tantas vacaciones  como quienes nos malgobiernan.
El editor

La poesía

Por: Liliana Bodoc



La poesía es un modo de la desobediencia. Llega si quiere, pero nunca tarde. Se coloca su máscara inaudita, se calza sus altos, merecidos zapatos. Y ya no se parece a nadie.
La poesía tiene una voz de arena y otra de piedra, tiene una voz de escándalo de plaza y una voz de secretos junto al fuego. Y en el canto las mezcla, diciendo y desdiciendo, con hebras negras y con hebras blancas. Hace en un verso y en el otro deshace; afirma y niega con las mismas palabras.
Porque su obligación no es la verdad. No es la admonición ni la plegaria... La poesía no tiene otro deber que ser un atentado contra el miedo, ni más obligación que estremecernos como el último acorde que suena en el final gastado de una noche.
Ir contra la quietud..., hostigar el equilibrio del estanque buscando que todo se transforme en río. Navegar es el primer asunto del poeta. Y nosotros, parados en la orilla, queremos construirnos una balsa, soltar amarras y desobedecer de cara al horizonte.
Porque también vivir, porque también morir deben ser modos de la desobediencia.

Fuente: elartedelosconfines.blogspot.com

Así nos quieren desde arriba

Por: Ajíbrujo
Laurence Summer fue Vicepresidente del Bco. Mundial en la década del 90. y presentó un memorando interno cuando se gestaba la preparación de la "Cumbre de la Tierra Eco 92" en Río de Janeiro.
En ese memorando interno preguntaba ¿no debería el Bco. Mundial alentar una mayor transferencia de Industrias sucias al Tercer Mundo?
Y continuaba: "numerosos países se encuentran muy limpios por lo que sería lógico que recibieran industrias sucias y residuos industriales, ya que tienen una mayor capacidad de absorción de contaminantes sin que se produzcan grandes costos".
Summer liga estos costos "al aumento o retroceso de la mortalidad". Desde este enfoque economista "una cierta cantidad de contaminación perniciosa debería ser realizada en países con costos más bajos, con menores salarios, por lo que las indemnizaciones a pagar por los daños serán también más bajas que en los países desarrollados." Opinaba que esta lógica "es impecable y debemos tenerla en cuenta". Agregó que "las sustancias cancerígenas tardan muchos años en producir sus efectos, por lo que estos serán menos llamativos en los países con una expectativa de vida baja, es decir, en los países pobres donde la gente se muere antes de que el cáncer tenga tiempo de aparecer". Y se quejaba que "se genera tanta polución con industrias que no se pueden trasladar, transporte, generación de electricidad, que hace que los costos de transporte por unidad de residuos sólidos sean tan altos". Y continuó sosteniendo que "la preocupación por un agente que causa un cambio en 1 punto en 1 millón en las posibilidades de cáncer de próstata será, obviamente, mucho más elevada en un país en que la gente vive lo suficiente para contraer cáncer de próstata que en un país donde la mortalidad por debajo de los 5 años es de 200 por mil".
Lawrence Summer fue después Secretario del Tesoro del Presidente Bill Clinton y principal consejero económico de Obama. Se desempeñó en la Universidad de Harvard, donde van a estudiar la mayoría de los economistas latinoamericanos, que como buenos alumnos, toman nota de sus recomendaciones de llenar de veneno y muerte a los países pobres, de los que –por si algún desprevenido no se ha enterado- somos parte.
Así, mientras la mayoría de la gente está preocupada sobre cómo llegar a fin de mes o sobrevivir al estrés diario de la ciudad, estos señores dictan la muerte a nuestros recursos vitales: contaminando cielo, tierra, aire y agua cometen un geocidio que a este ritmo también terminará con la raza humana. ¿Parece exagerado? Hace veinte años el calentamiento global era sólo una teoría, y hoy lo vivimos en carne propia. ¿Reaccionará la humanidad antes de que el capitalismo consuma toda la vida?

Fuente: nominas.blogspot.com

Ecología y Salud

Por: Antonella Perasso y Lidia Perasso


DIGALE SI AL KIWI

El kiwi es una fruta tropical de efecto diurético y laxante, ideal para incluir en las dietas de aquellos que desean disminuir el peso.
Aporta vitamina C, antioxidante que reduce el riesgo a padecer enfermedades cardiovasculares, degenerativas e incluso cáncer. También evita malformaciones fetales.
Esta fruta, de aspecto poco llamativo, aumenta la absorción de hierro por lo cual se recomienda en casos de anemia. Por su alto contenido en ácido fólico, es necesaria para las embarazadas, pues disminuye el riesgo de padecer espina bífida en los fetos. Su gran cantidad de fibra le confiere propiedades laxantes por lo cual está indicada para quienes padecen de estreñimiento. Tiene efecto saciante y posee pocas calorías por lo cual es requerida por quienes quieren perder peso.
Es recomendada para la hipertensión (presión arterial alta) y para los que padecen enfermedades cardíacas por su bajo contenido en sodio.
Es beneficiosa para el control de la glucemia en los diabéticos. Pero su gran aporte de potasio la convierte en la fruta ideal para quienes toman diuréticos ya que eliminan este mineral.
Por ser rica en luteína previene el cáncer, las enfermedades cardíacas y patologías tales como la degeneración macular y las cataratas causantes de ceguera.
El magnesio que contiene mejora el funcionamiento de los intestinos, nervios y músculos.
Recomendada para fumadores, bebedores y para los que poseen disminuidas sus defensas, a las mujeres que transitan la menopausia les reduce los sofocos.
Y como si esto fuera poco reduce el colesterol sanguíneo.
Por lo tanto, esta apetitosa fruta tropical es útil para casi todos. Sólo deben evitarla los que padecen insuficiencia renal.
Después de mencionar tantas virtudes y tan pocos defectos el kiwi es una fruta que vale más de lo que pesa.
Por eso, dígale sí al kiwi.

Fuente y consultas: lidiarosaperasso@yahoo.com.ar

Microrelatos

Breve aportación a la taxonomía del infierno
Miguel Ibáñez de la Cuesta


Los que alguna vez rechazaron el verdadero amor —el de los culebrones— por pereza, cobardía o cortedad rastrera, fueron condenados a vivir en las azoteas. No pueden bajar de ellas sin exponerse a graves peligros, puesto que les fue arrebatado el hábito de vivir a ras de tierra, que en otros tiempos fue para ellos un vicio, más que una necesidad o una costumbre.
No se suelen mostrar a la vista. Se les presiente a veces —un roce, una sombra, un ligero comezón en la nuca—, si uno se toma la molestia de subir a la azotea de su casa y fingir que cuelga la ropa despreocupadamente.
A veces cantan canciones tristes de cosaco desterrado, y suenan como si el viento revolviera las páginas de un libro de Amado Nervo o de Campoamor que alguien olvidó en un parque hace muchos años.
Aunque nadie los ha visto de frente, los estudiosos de Swedenborg y de Borges deducen que tienen cara de sábana vieja, un poco amarillenta por los costados y demasiado pálida en el centro. También se les supone arrepentidos, en algunos casos; aunque lo que les sucede a la mayoría de ellos es que están atacados de vértigo, simplemente.
Yo intenté componer un relato con esos personajes, pero lo único que me salía era un cuento inglés de fantasmas del siglo XIX, escrito en un inglés noble y victoriano que a mí, francamente, no me suena familiar, y si se tiene en cuenta que yo no sé inglés aún se comprenderá mejor lo violento que llegué a sentirme.
Lo volví a intentar y me volvió a salir el mismo relato —sospecho además que ya estaba escrito—, así que me conformé con una breve descripción que enviaré a alguna revista de geografía urbana o de turismo de aventura.


Fábula del hombre ilustre y la madeja de hilo
Miguel Ibáñez de la Cuesta


La primera palabra del hombre ilustre fue: mamá.
La última, apenas una exhalación en la que algunos creyeron reconocer el nombre de uno de sus personajes literarios; otros una grosería; otros un simple ¡ay! prolongado, esforzado y fatal.
Entre ambas palabras hubo una larga carrera de discursos, novelas, conferencias, solemnidades, declaraciones, vulgaridades, confesiones, hipocresías, lirismo, vanidades, palabras de amor, de odio y de estudiada indiferencia.
El hombre ilustre se había pasado la vida desenredando el laberinto de las palabras, como cuando uno se empeña en desenredar una madeja de hilo llena de nudos, simplemente porque el hilo y los nudos están ahí, exhibiendo malignamente su embrollo como un reto, para darse cuenta al final de que en realidad con un pequeño extremo le hubiera bastado para coser un botón.

Poesía porque sí

Hoy: Varieté!

Anarquismo

La noche y el caos forman parte de mi.
Me remonto al silencio de las estrellas.
Soy el efecto de una causa del tiempo,
del Universo [quizás lo excedo].
Para encontrarme, debo buscarme entre las flores,
los pájaros, los campos y las ciudades,
en los actos, las palabras y los pensamientos de los hombres,
en la noche del sol y las ruinas olvidadas de mundos hoy desaparecidos.
Cuanto más crezco, menos soy.
Cuando más me encuentro, más me pierdo.
Cuanto más me pruebo, más veo que soy flor
y pájaro y estrella y universo.
Cuanto más me defino, menos límites tengo.
Lo desbordo todo. En el fondo soy lo mismo que Dios.
Mi presencia actual contiene las edades anteriores a la vida,
los tiempos más viejos que la tierra,
los huecos del espacio antes de que el mundo fuera.

Fernando Pessoa
Animal cansado

Quiero un amor feroz de garra y diente
Que me asalte a traición a pleno día
Y que sofoque esta soberbia mía
este orgullo de ser todo pudiente.

Quiero un amor feroz de garra y diente
Que en carne viva inicie mi sangría
A ver si acaba esta melancolía
Que me corrompe el alma lentamente.

Quiero un amor que sea una tormenta
Que todo rompe y lo renueva todo
Porque vigor profundo lo alimenta.

Que pueda reanimarse allí mi lodo,
Mi pobre lodo de animal cansado
Por viejas sendas de rodar hastiado.

Alfonsina Storni

Para leer en forma interrogativa

Has visto
verdaderamente has visto
la nieve los astros los pasos afelpados de la brisa
Has tocado
de verdad has tocado
el plato el pan la cara de esa mujer que tanto amás
Has vivido
como un golpe en la frente
el instante el jadeo la caída la fuga
Has sabido
con cada poro de la piel sabido
que tus ojos tus manos tu sexo tu blando corazón
había que tirarlos
había que llorarlos
había que inventarlos otra vez.

Julio Cortázar

Las paredes dicen

En las ciudades, los muros representan la voz de quienes no pueden acceder a otros medios de expresión. Desde el anonimato –con humor, poesía e ironía– la gente imprime las ideas de todos y ninguno, voces que circulan por la ciudad, de boca en boca, y aparecen en cualquier pared, denunciando a la prensa que no informa, acusando al poder que traiciona o, simplemente, compartiendo metáforas colectivas.
Éstas son algunas pintadas que encontramos en las paredes de distintas ciudades.

¿Y si no me creen a quién le miento? (Quito, Ecuador)

Mi poncho no es antibalas. (Quito, Ecuador)

Gato que ladra, bilingüe. (Quito, Ecuador)

Silencio. Bebé durmiendo. (En el muro de una avenida céntrica de Quito, Ecuador)

¿Por qué nuestros sueños son sus pesadillas? (Quito, Ecuador)

¿De qué color son las cunas de los niños de la calle? (Quito, Ecuador)
 
Si las bombas caen del cielo, ¿no será Dios el terrorista? (Otavalo, Ecuador)

¿Educación o cajeros automáticos? (Bogotá, Colombia)

No es que tengamos poco tiempo, sino que perdemos mucho. (Bogotá, Colombia)

Ya tengo casa, perro y auto. ¿Ya puedo ser americano? (Cochabamba, Bolivia)

Me gusta cuando votas, porque estás como ausente.
(Facultad de Filosofía y Letras, B.A.)
 
¿Por qué si cárcel y prisión son sinónimos,
no lo son prisionero y carcelero? (Buenos Aires, Argentina)
 
Cuando los medios digan la verdad, las paredes callarán.
(Caracas, Venezuela)

¿Existe la vida antes de la muerte? (Buenos Aires, Argentina)

¿Por qué se suicidan las hojas cuando se sienten amarillas? (Quito, Ecuador)

No es una jaula vacía, es un pájaro libre.
(Parque El Desafío, Trelew, Chubut, Argentina)

Cabalga hacia el Sol con el alma de una luna. (Cuenca, Ecuador)

Los psicólogos saben qué hacer en cada caso menos en el suyo.
(La Paz, Bolivia)

El que no lucha por lo que quiere
no merece lo que desea. (Estación Darío y Maxi, Buenos Aires)

Nos mean y la prensa dice que llueve. (Buenos Aires, Argentina)

Si el voto cambiara algo, estaría prohibido. (Buenos Aires, Argentina)

¿Y si hay guerra y nadie va? (Bogotá, Colombia)

No soy un turista. Soy un nativo armado (En una camioneta 4x4 de Bogotá)

No podrán vallar la furia popular (Buenos Aires, Argentina)

¿Por qué sólo el mercado es libre? (Quito, Ecuador)

Sonríe. El Estado te controla. (Montevideo, Uruguay)


Fuente: www.latitudbarrilete.blogspot.com